En esta ocasión hablaremos de un documento fundamental en la relación Profesional de la Salud – Paciente, el consentimiento informado.
Éste es un manifiesto escrito donde el firmante expresa voluntariamente su interés de participar -o no- como receptor de la prestación de un servicio –servicio odontológico en este caso-.
Constituye a su vez un documento legal que facilita la comunicación directa entre el médico tratante y el paciente ya que ayuda a mantener las expectativas realistas del paciente con respecto a los objetivos que le interesa alcanzar al decidirse por una alternativa de tratamiento en particular.
Las ventajas para el paciente
En este documento se especifica al paciente cuales son los requisitos a tomar en cuenta y los beneficios del tratamiento al que desea someterse, así como los posibles riesgos o desventajas que podrían presentarse con dicho tratamiento durante el ejercicio del mismo o posteriormente a mediano y largo plazo, con lo cual se le permite al paciente tomar consciencia plena del tratamiento en cuestión.
El consentimiento es la defensa de los derechos del paciente cuando el ha expresado su intención de recibir un tratamiento específico por el cual ya ha pagado y asistido a sus respectivas consultas en tiempo y forma; cuando el tratamiento solo fue simulado, ignorado u omitido en su totalidad suele ser un hallazgo incidental frecuentemente encontrado por otro médico tratante, que realiza un tratamiento tiempo después sobre el o los dientes en cuestión.
Cabe mencionar que para complementar la defensa del paciente debe contar con la copia de su consentimiento informado, radiografías, fotografías y factura (s) de evidencia que constaten la omisión del servicio por el que pagó en su momento en tiempo y forma.
Las ventajas para el odontólogo
El consentimiento estipula claramente el deseo del paciente a someterse o su negativa a someterse a una o varias alternativas de tratamiento, con lo cual queda expresado que el odontólogo es libre de ejercer o no ejercer el tratamiento según la petición específica del paciente.
En caso de requerirse alguna aclaración personal o de requerimiento legal -si fuera el caso- el consentimiento informado firmado por el paciente y el odontólogo apoya al odontólogo como evidencia del respeto de los principios de libertad del paciente y su ejercicio profesional.
Finalmente notemos que:
- La historia clínica
- El consentimiento informado
- Las radiografías iniciales (previas al tratamiento)
- Las radiografías finales (una vez finalizado el tratamiento)
- Evidencia fotográfica
- Modelos de estudio
Forman parte de los puntos básicos de una consulta que no deben ser tomados a la ligera o ignorados por los pacientes o por los profesionales de la salud bucodental ya que constituyen el historial y evidencia de los procedimientos realizados y asegurando la tranquilidad de pacientes y médicos al permitir deslindar responsabilidades en la toma de decisiones sobre tratamiento por ambas partes.
Así que no lo olvide, el consentimiento informado es un documento tan importante para usted como para el médico que lo atiende, no dude en solicitar una copia de dicho documento siempre que considere necesario.